domingo, 21 de diciembre de 2008

LAMENTACION SEPTIMA ...parte I

De los Atheistas Politicos, discipulos de Tiberio Cesar, Cornelio Tacito, Mons de la Nove, Plessis, Morneo, Bodino, y Machiavelo. Recopilanse, 26. errores dellos. Y apuntanse 12. virtudes de un buen Principe, y 12. defectos del malo: haziendo mencion de 12. Principes bueno, y 12. malos, nombrados en la Sagrada escritura.

Hasta agora he lamentado la miseria de los Ateistas blasphemos, sensuales, libertinos, perfectistas, è hypocritas. Agora (para lamentar la de los Atheistas politicos) quiero invocar al Cielo y a la tierra, para que oygan mis clamores, y la quexa que Dios tiene contra los Principes, a quien el ha enrriquecido, y engrandecido, y le desprecian, y desconocen, conociendo el buey a su posseedor, y el asno al pesebre de su Señor. Porque (como son estos Principes el coraçon y cabeça de sus Republicas) la herida del Atheismo que en ellos huviere, es herida mortal, y tan mala, que de los pies a la cabeça no te dexa cosa sana, como llora el Profeta Isaias. Y para proceder en esta lamentacion con mas claridad y orden, quiero cornençar, declarando este nombre Atheista politico. Polis en Griego quiere dezir Ciudad: y assi politico significa, el que govierna Ciudad: y en nombre de Ciudad se entiende, Provincia, Reyno, Imperio, Obispado, Diocesis, y qualquier Republica. Y porque este govierno es en dos maneras, conviene a saber Eclesiastico y Seglar, Politicos se llaman todos los Eclesiasticos que goviernan en lo espiritual sus Iglesias, como Arçobispos, Obispos, Curas, Beneficiados, &. Y en lo temporal, sus Republicas, como Emperadores, Reyes, Duques, Governadores, Magistrados y qualquier otros Juezes y Señores temporales. Y para que procedamos con mas claridad y resolucion, llamemos con este nombre Principes a todos los que goviernan.

Estos Principes son en dos maneras, unos son buenos, y otros son malos: los buenos Principes se llaman los que son buenos en su persona, y buenos en su govierno, que goviernan bien sus subditos: los Principes malos son, los que en su persona viven mal, o goviernan mal a sus inferiores, porque Malum ex particulari defectu. Y assi aunque un Principe govierne bien, si es malo en su persona, se puede llamar mal Principe. Estos Principes malos, son en dos maneras. La primera, Principes defectuosos, y pecadores, que en su persona, o govierno, tienen algunas faltas. La segunda, Principes Atheistas y sin Dios. Y estos se llaman los que son tan malos, que tienen a Dios en menos estima que a su estado: y hazen a sus Republicas ultimo fin, y a Dios y a las cosas divinas medio para alcançar el fin de su felicidad, hazienda, reputacion, conservacion o augmento de su Republica, y para conseguir este fin, cierran los ojos a todas las razones divinas, y solamente se goviernan por razon de estado, profesando la abominable doctrina de algunos que escriven, que todo lo bueno se ha de postponer por alcançar sus pretensiones temporales; y esta razon de estado tienen por ley, y por fee.

Destos Atheistas ay, y ha avido muchos en el mundo: pero de los que han escrito en particular de las leyes, avisos, reglas y aranzel, por donde se han de guiar los que quisieren alcançar el augmento y consecracion de su republica (entre otros) los principales son, el Emperador Tiberio Cesar: el Historiador Cornelio Tacito: un Juan Bodino en su libro que el intitula Methodus Historiae, y en otro llamado Demonomania, y en un otro intitulado De Republica. Y Philippo Morneo, en el libro que escrivio de veritate Christianae Religionis: y un soldado Calvinista llamado Mons de la Nove en sus discursos Politicos y Militares: y otro llamado Mons de Plessis. Pero quien mas de proposito, y con mayor daño de la Christiandad ha escrito desta maldita doctrina, fue un Secretario del Duque de Florencia, llamado Nicolao Machiavelo, en tres libros que haze de la Institucion del Principe. Por laqual causa, muchos llaman Machiavelistas a estos Atheistas politicos.

Contra esta pestilencial doctrina, han escrito otros muchos, assi hereges como Catholicos. Un Calvinista escrivio un libro intitulado Antimachiavelo, que (aunque esta inficionado con los errores de Calvino) descubre muy al vivo los de Machiavelo. El Doctissimo y religiosissimo Padre Antonio Fossenino de la Compañia de Jesus, escrivio admirablemente contra Bodino y Morneo, y en su libro primero Bibliothecae selectae en el capitulo veyntiseys. Y tambien un Canonigo de Tournay, llamado Pedro Correto, escrivio otro libro intitulado Defensa de la verdad, contra las proposiciones de Mons de la Nove: y el Padre Pedro de Ribadeneyra, tambien de la Compañia de Jesus compuso en Español un admirable libro, llamado, De la Religion y virtudes que deve tener el Principe Christiano, para governar y conservar sus Estados, contra lo que Nicolas Machiavelo, y los Politicos deste tiempo enseñan.

No es mi intento disputar de proposito contra los errores de los Politicos, sino llorar su ceguedad, y el daño que causan (si Dios no lo remedia) y porque es dificultoso descubrir las serpientes, escondidas debaxo de las yervas y flores destos hereges, que van con tanta Rhetorica y artificio solapando su abominable doctrina debaxo de razones dulces y aparentes: y es trabajo no pequeño reduzillas a methodo. Para que mejor se entiendan, me parecio seria bien nombrar doze fuentes de donde mana el agua de la doctrina de un buen Principe, que estos inficionan, y entosigan con su ponçoña. Estas se pueden llamar Razon, Fee, Consejo, Observancia, Rectitud, Culto divino, Recato, Beneficiencia, Verdad, Religion, Zelo, y Paz.

Y para declarar la bondad del buen Principe en pocas palabras, y que nos de luz para entender los defectos del Principe malo, y los errores destos Atheistas Politicos me parecio a proposito escoger doze buenos Principes de la sagrada escritura, y otros doze malos para reduzir a ellos la maldad de los Atheistas Politicos, llevando la vida de los unos, y de los otros por guia y nivel, de lo que dire. Los buenos, son Christo Jesus, Abraham, Jacob, Moyses, Samuel, David, Ezechias, Josaphat, Onias, S. Pedro, S. Juan, y los Apostoles de Christo. Los malos, el Anti-christo, los Principes de Sodoma, Esau, Pharaon, Saul, Hely, Acaz, Roboan, Jason, Pilatos, Herodes. Y los Principes de los Judios, Escribas y Phariseos; Con esta luz procedere a contar en breves palabras las virtudes de un buen Principe, las faltas del malo, y los errores de los Atheistas Politicos por el orden siguiente.


De la Razon, y de Christo, y el Ante-christo

El buen Principe govierna su vida, y su Republica por verdadera razon Christiana, teniendo a Dios y a su divina honra y gloria por fin, y principio de sus obras, y de la administracion de su Republica, y ha de ser tal que examinado en el amor de Dios pueda responder con San Pedro, que le ama mas que todos, y que ama mas a Dios que a todas las cosas criadas, y perdera su estado, augmento, y conservacion de su Republica, honrra, hazienda y reputacion por no ofender a este gran Señor. De la manera que Christo (que es verdadero Dios, y suma bondad) descendio del cielo por salvarnos y llevar las almas al cielo, padeciendo por este fin muerte y passion. Y pues los Principes y Reyes son ungidos y se llaman Christos, la regla y el nivel por donde han de proceder en su vida, y govierno es la razon Christiana.

Al contrario el Antichristo, tendra por fin dilatar su Imperio con engaños, crueldades, y abominaciones, siguiendo su amor proprio interes y reputacion, y posponiendo a la conservacion y augmento de su estado toda razon, bondad, y justicia. Y assi el mal Principe falta en el servicio de Dios, y en administrar sus vassallos, de modo que se salven, poniendo los ojos en sus provechos, antes que en la salvacion y fruto espiritual de las almas que govierna. Y quando alguno destos llega a tanta desventura, que professa querer y estimar mas el augmento y conservacion de su estado, que a su Criador y a las cosas divinas, poniendo por fin y teniendo en lugar de Dios a su Republica, y haziendo a Dios y a su divina honrra, medio para alcançalla este tal es Atheista Politico, y se govierna por sola la razon de estado, y deste primero error nacen todos los demas que contaremos.


De la Fee, Abrahan, y de los Principes de Sodoma

El buen Principe sigue, tiene y professa la verdadera fee, que es la Catholica Romana, y esta procura introduzir y conservar en sus vassallos: porque sin fee es imposible agradar a Dios; y assi es semejante a Abraham, (llamado Padre de creyentes) porque saco el pueblo escogido de Dios de Hur de los Chaldeos.

El mal Principe, o es infiel en su persona, o se descuyda en conservar la verdadera fee en su Republica; Machiabelo dize, Que el Principe, no ha de professar otra fee, sino la que le estuviere bien para governar su estado con prosperidad. Si entrare a governar Lutheranos (para ser acepto entre sus vassallos) mude la fee Romana en la heregia Lutherana, lo mismo si Calvinista &. Y lo segundo dize. Que por conservar sus vassallos en paz, y tener prosperidad en su Reyno (aunque el viva como Christiano) permita libertad de conciencia, y dexe al que quisiere ser Lutherano, que oyga a la predica de Luthero, y al Calvinista que haga la cena de Calvino, &. abriendo puerta en su Reyno, para qualquier secta que a el quisiere venir, sin castigar ni estorvar ningun herege (si con esta libertad augmenta su Repub. y hazienda) viviendo cada qual como aquellos Principes de Sodoma, que ellos y sus moradores con libertad seguian la abominacion que les dava gusto.


Del Consejo, Jacob y Esau

Jacob por admitir el consejo de su Madre Rebeca, y estar sujeto y obediente a su Padre, gano el mayorazgo y alcanço la bendicion. Y assi el buen Principe ha de governar su persona y estado con consejo de los mas sabios, y ancianos, y obedecer los buenos consejos y avisos de los buenos Principes, y Reyes de sus Antecesores, ymitando su buena vida. Mas el mal Principe sigue su proprio parecer: y como de ordinario nace el parescer del proprio amor, y de las passiones, a quien estan sujetos los Principes, (tambien como los vassallos,) de aqui es. Que el Principe que no admite ni sigue el parecer de sus tribunales y Consejos, ni gusta de Consejeros, siempre yerra. Assi como Esau, que siguiendo su appetito perdio el mayorazgo por gula de una escudilla de potage vermejo, y anduvo rebelde a sus Padres hecho Montaraz y Caçador, y persiguiendo a su hermano Jacob. Y la quarta regla que pone Machiabelo a sus Principes Politicos es. Que siempre sigan su proprio parecer, y no admitan otro consejo que el suyo, y aquel hagan guardar y cumplir sin querer dar oydos a quien les aconsejare lo contrario.


De la Ley, Moisen, y Pharaon

La observancia de la verdadera ley es el quarto ornamento de un buen Principe: y procurar que escriva Dios con su dedo la ley verdadera en su coraçon, y hazella guardar a todo su pueblo, como hizo Moysen, quando alcançò la Ley en el monte Sinay con señales del cielo. Y con su oracion (teniendo las manos altas) vencio a los Arnalachitas, peleando con mayor fuerça con su bondad y espiritu delante de la divina Magestad (de donde viene todo buen Imperio, govierno, poder y Magestad a los Reyes y Principes del mundo) que con la fortaleza de sus soldados. El Principe malo, endurecido en sus vicios, opresor de los justos, y rebelde a los divinos mandamientos, como Pharaon, no cura de la guarda de la ley, ni haze caso de las cosas divinas: y al fin viene con los suyos, a ser anegado en el abismo de la maldad. Dize Machiavelo, que las victorias y buenos sucesos de Moysen, se havian de atribuyr a caso y fortuna, o al valor y prudencia de su persona y Capitanes y soldados, y no a Dios. Y que no ay que hazer caso de señales del cielo, ni de milagros, y maravillas, ni se ha de dar a ello credito, mas de para tornar de ay ocasion de mover a los soldados, a que tengan corage contra los enemigos. Y que como tengan este brio y fuerça, no haze al caso que sean buenos, o malos que blasphemen de Dios, o le bendigan &.


Del culto divino, y de Samuel, y Heli

El verdadero Principe lleva por principal blason de su vida y govierno (en paz y en guerra) el culto divino. Que hasta los gentiles pusieron su felicidad, en esta adoracion de sus falsos Dioses: haziendoles sacrificios para aplacar su yra. Porque siendo el Rey devoto, y amigo de honrrar a Dios, y reverenciar sus Iglesias, y lugares sagrados, Dios bolvera por su causa, hara sus negocios, y governara su Reyno, assi en lo espiritual como en lo temporal. Buen Principe Eclesiastico fue Samuel, que tanto cuydado tuvo del templo y del altar y su trato, y comunicacion para acertar en el buen govierno, era siempre con Dios.

Muy al reves del mal Principe de los Sacerdotes Heli, que por no yr a la mano a sus malos hijos, para que no se aprovechassen mal de lo que en el templo se sacrificava, ni contaminassen el lugar sagrado, con las mugeres que venian al sacrificio, permitio Dios en castigo destos sacrilegios, que Heli y sus hijos muriessen mala muerte, y el arca del Señor fuese llevada cautiva de los Philisteos. No hazen caso los politicos Atheistas de la reverencia, que se ha de tener a los lugares sagrados, ni temen el castigo que Dios suele dar a los sacrilegos: antes aconsejan, por via de buen govierno a los Reyes y Principes seglares: que se aprovechen de los bienes y rentas Ecclesiasticas, para sus guerras y ocurrencias. Y que no castiguen sus soldados, ni les prohiban el no entrar y saquear las Iglesias, de sus adversarios Christianos, y robar los ornamentos y joyas de oro y plata de las Sacristias, despojando los altares: porque anden con mas fervor y animo en las guerras de sus Principes.


Del valor, y de David, y Saul

Thomas Bozio escriviendo contra Machiavelo, haze un libro que intitula, de robore bellico: donde prueva en algunos capitulos, que el verdadero valor de los Reyes y Principes, nace de la religion Christiana: y de llevar siempre el Principe por fin en sus batallas, bolver por la honra y gloria de Dios: castigando los rebeldes para que no levanten cabeça contra su Señor. Buen Principe fue David, y hecho al coraçon de Dios, devoto era, pero valeroso temeroso de Dios, y magnanimo, rendido a la divina voluntad, y valiente: pues se lee que de un solo acometimiento degollò docientos Philisteos. Y sin mas armas que una honda, y cinco piedras confiando en la justicia divina por quien peleava, cobro tanto valor, que de la primera pedrada derribo a sus pies el Gigante Golias; y es cosa maravillosa que queriendo el Espiritu Santo tratar de su Valentia y del valor de sus Capitanes, le llama tenerrimus ligni vermiculus, ternissimo gusanillo de madero; como quien dize: en esta su humildad, y desconfianza de si, consistia su valentia valor y grandeza de animo. Que es muy diferente el valor de un Principe buen Christiano, al que tiene el malo que en Dios no confia.

Digo esto a proposito de la mala doctrina de Machiabelo: que publica. Que los Christianos no pueden ser valientes, ni valerosos: porque dize, que la ley de Jesu Christo les enseña a sufrir, y padecer y a bolver el otro carrillo a quien les diere un bofeton, y cosas semejantes, que dize ser contrarias al valor y valentia. Y especialmente que ponen nombres a los Christianos de personas pusilanimes, como Francisco, Juan &. que no hizieron valentias; que si les llamaran Hercules, Hector, Achilles, &. mas se animaran, y cobraran mayores brios. Desventurado hombre que no leydo las muchas victorias, que han alcançado Christianos grandes siervos de Dios. Antes el valor nace de llevar (quando uno va a pelear) a Dios en el alma y en el cuerpo, que da mayor corage, brio y poder: segun aquellas palabras, omnia possum in eo qui me confortat, y lo que dize el refran lleva un leon en el cuerpo. Y que buen leon del tribu de Juda es Christo Jesus, Dios omnipotente! Buenas victorias alcanço Saul (mientras fue amigo de Dios) mas en apartandole el Señor de su coraçon, quedò tan pusillanime y cobarde, que le parecio ser necessario acudir a una hechizera Phitonissa, para alcançar animo, y aunque Saul la hablò, quedò muerto y todo su exercito desbaratado en los montes de Gelboe. Dize Bodino (uno destos Machiavelistas) que el buen Rey y Principe se ha de aprovechar de hechizeros y negromanticos, para alcançar sus victorias, invocando a los demonios que le ayuden. Como sino fuesse mas valeroso Dios, de donde viene todo el valor a los buenos Principes, que el diablo Padre de toda flaqueza y mentiras.

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